Balarama y Krishna estudiaron con el Gurú
Sandipini, ofreciéndole un tributo de amor
y reverencia. Ambos vivieron bajo los
siguientes lineamientos: dar alegría al
maestro estudiando bien lo que les enseñaba,
evitar satisfacer los placeres de los sentidos,
y dedicarse sólo a la búsqueda de
conocimiento. Nunca interrumpieron el
discurso de su preceptor, ni interpusieron
su voluntad a la de él. Bajo ninguna
circunstancia transgredieron su voluntad
o sus indicaciones. Nunca desafiaron su
autoridad ni se atrevieron a desobedecer
sus instrucciones. A pesar de ser Balarama
y Krishna depositarios de la autoridad
suprema sobre la Tierra y el Cielo,
dieron a su preceptor el respeto y la
obediencia debidos, por su eminencia
y posición. Estaban llenos de dedicación
y devoción. No permitían que nada les
distrajera de sus lecciones. Así es como
debe ser un buen estudiante; así
es como eran Balarama y Krishna.
-BABA
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