Una vez un hombre que tenía cuatro esposas
tuvo que ir a Bombay por trabajo. Desde allí
les escribió a todas ellas, diciéndoles que es-
taba preparado para llevar a casa lo que cada
una de ellas quisiera. La primera esposa pidió
algunos tónicos buenos para su salud, así co-
mo alfombras y ropa de lana, para que le fue-
ran útiles cada vez que se enfermara. La se-
gunda esposa quiso algunos saris de última
moda, joyería típica de Bombay y otros artí-
culos decorativos. La tercera le pidió que se-
leccionara para ella algunos libros religiosos
como el Jnaneshwari, abhangs, etc, disponi-
bles en las librerías de Bombay, así como
imágenes de Pandharinat, Bhavani y Sai Ba-
ba. La cuarta esposa no tenía ninguna lista
en absoluto; simplemente escribió: "Si regre-
sas pronto y seguro, eso será suficiente para
mí". Las otras obtuvieron grandes paquetes
que contenían todo lo que habían pedido, pe-
to la última consiguió su amor. Dios les da to-
do aquello que piden; así que piensen bien y
disciernan con claridad antes de orar y pedir.
-BABA
Por eso uno tiene que tener cuidado con lo que le pide a Dios, porque puede que no sea lo más adecuado. Mejor que eso es la entrega, porque Dios conoce mejor que uno lo que más le conviene.
ResponderEliminarOjalá q Dios me escuche lo q estoy pidiendo!!
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