Sumérgete profundamente en tu propia divinidad.
El cocodrilo es feliz, indemne e invencible cuando
se halla en las profundidades de un lago o río.
Una vez que se tumba sobre el suelo, se convier-
te en un juguete y un blanco fácil. Recuerda es-
to: las profundidades son tu refugio, la fuente de
tu fuerza. Permanece en ellas. No permitas que
tus pensamientos se extravíen en aguas someras
o en la arena. La repetición del Gayatri Mantra
desarrolla el dhi shakti (la capacidad de discerni-
miento), y por lo tanto sus resultados serán el a-
bandonar las malas compañías y el buscar la com-
pañía de almas nobles. Si no dispones de satsang
(buena compañía), puedes estar acompañado por
tus propios impulsos superiores y pensamientos
nobles. Cuando te estableces en la Luz Divina,
no hay preocupación, dolor o vanidad que pueda
dañarte. -BABA
No hay comentarios:
Publicar un comentario